El amor es como el vino, y como el vino también, a unos reconforta y a otros destroza. Es intensidad y por esto: estira los minutos y los alarga como siglos. Es siempre tímido ante la belleza. Es una maravillosa flor, pero es necesario tener el valor de ir a buscarla al borde de un horrible precipicio. Y sin erotismo no existe. El erotismo sin amor es frecuente. Y si deseas mucho a alguien deja que se vaya, si vuelve será tuya para siempre, si no vuelve nunca ha sido tuya.
jueves, 30 de agosto de 2007
Chat Público con Skype
sábado, 11 de agosto de 2007
Suscribirse a:
Entradas (Atom)