sábado, 29 de septiembre de 2007

La poesia de Juan

jueves, 27 de septiembre de 2007

Dejar de querer

Se deja de querer, y no se sabe por qué se deja de querer.

Es como abrir la mano y encontrarla vacía,
y no saber, de pronto, qué cosa se nos fue.

Se deja de querer, y es como un río
cuya corriente fresca ya no calma la sed;
como andar en otoño sobre las hojas secas
y pisar la hoja verde que no debió caer.

Se deja de querer, y es como el ciego
que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren;
o como quien despierta recordando un camino,
pero ya sólo sabe que regresó por él.

Se deja de querer como quien deja
de andar por una calle, sin razón, sin saber;
y es hallar un diamante brillando en el rocío,
y que, al recogerlo, se evapore también.

Se deja de querer, y es como un viaje
destinado a la sombra, sin seguir ni volver;
y es cortar una rosa para adornar la mesa,
y que el viento deshoje la flor en el mantel.

Se deja de querer, y es como un niño
que ve cómo naufragan sus barcos de papel;
o escribir en la arena la fecha de mañana
y que el mar se la lleve con el nombre de ayer.

Se deja de querer, y es como un libro
que, aún abierto hoja a hoja, quedó a medio leer;
y es como la sortija que se quitó del dedo,
y sólo así supimos que se marcó en la piel

Se deja de querer y no se sabe
por qué se deja de querer...

lunes, 10 de septiembre de 2007

El Funcionamiento del Cerebro

Aprende Cómo Alfred Hitchcock Supo Entender el Funcionamiento del Cerebro Mucho Antes que la Mayor Parte de los Psicólogos

¿Cómo hacemos para comunicarnos con el mundo? Lo hacemos a través de los sentidos:
VISTA, OÍDO, GUSTO, OLFATO y TACTO
¿Cómo hacemos para comunicarnos con nosotros mismos? También lo hacemos a través de los sentidos:
• HACEMOS IMÁGENES MENTALES,
• OÍMOS NUESTRO PROPIO PENSAMIENTO O CONVERSACIONES,
• SENTIMOS SENSACIONES INTERNAS (de gusto, olfato, tacto)
Estos sentidos internos, estos canales de comunicación, son los que nos crean las sensaciones.
Los directores de cine crean sensaciones a través de la imagen y el sonido. Cuando Alfred Hitchcock filmó la película Psicosis, jugó con todos estos elementos para crear sensaciones de miedo en el espectador. Imágenes oscuras, primeros planos, secuencias muy cortas, música penetrante… Imagínate la secuencia de la ducha de la película Psicosis con colores pastel, planos alejados, una sola secuencia y música de los Beatles. Ya no sería la misma película, ya no crearía las mismas sensaciones.
Alfred Hitchcock sabía muy bien qué es lo que quería conseguir. Quería crear emociones en sus espectadores. Todos los directores de cine hacen lo mismo. Por medio del uso de los colores, el brillo, el enfoque, los ruidos y la música, crean emociones.
Lo hacen así porque saben que el cerebro funciona de esa manera. Los canales a través de los que pensamos crean nuestras emociones.
Nuestro cerebro utiliza una mezcla de eso canales perceptivos para crear distintas sensaciones. Si te sientes mal por algo y haces una imagen mental, tu cerebro está usando esa imagen mental concreta para hacerte sentir algo determinado. Si cambias el canal, cambiará la emoción.
Por ejemplo, si deseas quitarte una preocupación que te da vueltas y vueltas por la cabeza, haz lo siguiente:
• Paso 1: Delimita el problema que deseas modificar.
• Paso 2: Identifica qué canales perceptivos están funcionando cuando ocurre lo que quieres modificar. ¿Estás viendo imágenes? ¿Oyes algún diálogo entre personas, ruidos o monólogos? ¿Hay algún olor o sabor? ¿Notas alguna sensación física? Fíjate si existe una especie de mezcla de todo ello, como si fuera una película con imágenes, sonidos y sensaciones.
• Paso 3: Cambia consciente y voluntariamente de canal. Si eran imágenes, piensa en el tema con palabras internas. Si era un diálogo auditivo, piensa en ello como si fueran imágenes. Si era como una película con sonido, quita el sonido o quita la imagen. Observa qué cambios se producen en tu sensación.
• Paso 4: Si no se ha producido el cambio que deseabas, vuelve a cambiar de canal. Si era una imagen con sonido y le has quitado el sonido, centra tu atención en algún aspecto de tu percepción corporal, como la respiración, por ejemplo. Si notabas alguna sensación en su piel acompañada de imágenes y has quitado las imágenes, ponle sonido a la sensación cutánea.
• Paso 5: Puedes ir cambiando de canal todas las veces que sean necesarias.
Dentro de cada uno de estos canales (visual, auditivo, olfativo, gustativo o táctil) existen otras variables:
El canal visual lo podemos descomponer en otros muchos factores: tipo de color, tipo de brillo, tipo de contraste, si está enfocado o desenfocado, si la imagen es lisa o rugosa, si hay o no imágenes de fondo, el tamaño de la imagen, si tiene un marco alrededor o no, si es una imagen en movimiento o si es una imagen estática, etc.
El canal auditivo lo podemos descomponer en: el tono, el timbre, si el volumen se oye alto o bajo, el tempo, la duración, si es estéreo o mono, el ritmo, etc.
El canal táctil lo podemos descomponer en: la intensidad, la sensación de temperatura, la velocidad, si es de dentro hacia afuera o al revés, si hay o no sensación de movimiento, la tensión, la presión, etc.
Nuestro cerebro codifica todas estas variables para crear sensaciones. Si cambiamos estas variables, cambiará también la sensación.
¿Cómo hace una persona que tiene, por ejemplo, depresión? ¿Piensas que una persona con depresión hará imágenes con mucha o con poca luz? ¿Se hablará a sí misma con un tono jovial o con un tono patético? ¿Notará su cuerpo liviano o completamente pesado?
¿Cómo te parece que se hablará a si misma una persona que tiene ansiedad? ¿Se hablará con un tono de risa o se hablará con un tono de miedo? ¿Hará una imagen abierta o una imagen muy cerrada? Yo creo que ya sabes la respuesta.
La buena noticia es que si cambiamos esas codificaciones, cambiará automáticamente la respuesta emocional.